Consejos para disfrutar de una buena salud bucodental

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Es muy importante cepillarnos los dientes después de cualquier comida que hagamos durante el día. Los especialistas explican que la lengua también hay que limpiarla y utilizar hilo dental.

El Dr. Alejandro Martínez, dentista y miembro de Top Doctors, explica que el lavado de boca perfecto «debe incluir todas las caras de los dientes durante al menos dos minutos».

«No podemos olvidarnos de cambiar de cepillo dental cada dos o tres meses, dependiendo del estado del cepillo, y también recomendamos limpiar los espacios interdentales con ayuda de seda o hilo dental al menos una vez al día, preferentemente por la noche», dice el experto.

Puedes usar el hilo o seda dental con cera, porque es fácil de usar y evita que se deshilache entre los dientes. Los profesionales de la clínica Sigma Dental recomiendan cambiar la dirección de cepillado, porque si acostumbras a cepillar tus dientes de manera horizontal, no estás eliminando la suciedad sino desplazándola de lugar.

Lo mejor es seguir la posición de los dientes, es decir, de arriba abajo o de abajo arriba. Y para complementar tu limpieza bucal puedes utilizar un irrigador bucal.

La irrigación es una técnica de agua a presión que consigue eliminar todos los restos de comida. Es muy importante cepillarse los dientes justo después de comer.

«No tiene importancia que hayan pasado dos o diez minutos, pero sí que hay que acordarse de realizar la higiene tras cada comida, sobre todo si esta tiene azúcares», dice el doctor Martínez.

Sin embargo, no es aconsejable cepillarse los dientes después de comer alimentos ácidos, porque tiene un efecto contrario, ya que el ácido penetra más en los dientes y provoca degradación del esmalte. En este caso es mejor cepillarse los dientes 30 minutos después de comer, lo que permite que la saliva neutralice cualquier ácido.

Un estudio realizado por el Consejo General de Colegios Oficiales de Farmacéuticos en el que se preguntaba a los encuestados acerca de sus hábitos de limpieza bucodental.

En esta investigación se descubrió que el 80% de la población española tiene una higiene bucal inadecuada. A continuación, te explicamos cuáles son los errores más comunes del cepillado dental:

No dedicar el tiempo adecuado

Es fundamental que la limpieza bucal dure al menos dos minutos, es decir, 30 segundos por cada cuarto de la boca.

La dureza del cepillo

Lo mejor es comprar un cepillo de dureza media y recurrir a los blandos para aquellas personas que presentan problemas de encías o de esmalte. Evita los cepillos muy duros porque dañan las encías y aceleran el deterioro del esmalte de los dientes.

No lavarlo

Es aconsejable cambiar el cepillo cada 3 meses, porque las cerdas se deforman con el uso. También es necesario lavarlo después de cada uso, eliminando el exceso de agua para prevenir la proliferación de bacterias.

¿Cepillo eléctrico o cepillo manual?

Los cepillos eléctricos garantizan una buena técnica de cepillado y son idóneos para las personas con problemas de movilidad. Sin embargo, el uso incorrecto puede dañar las encías más sensibles, si no sabes cuál elegir pregúntale a tu dentista.

La elección del dentífrico

Para prevenir las caries utiliza los
productos fluorizados que contienen clorhexidina, triclosán u otros compuestos antibacterianos.

Los dentistas aconsejan emplear tan solo una bolita de dentífrico, para que el cepillo no resbale sobre los dientes sin arrastrar los restos de comida.

No te enjuagas con colutorio

Después del cepillado no debes enjuagarte la boca en repetidas ocasiones, porque los efectos del dentífrico se reducirán. Opta por un enjuague que contenga componentes como el flúor o la clorhexidina.

No usar hilo dental

El hilo dental previene las caries y la enfermedad periodontal que suelen originarse en la acumulación de placa en los espacios interdentales.

No usar cepillos interproximales

Apuesta por los cepillos que incluyen clorhexidina en los filamentos.

Creer que las pastas blanqueadoras no funcionan

Es cierto que no eliminan las manchas internas de las piezas dentales porque no penetran en el esmalte, pero pueden remover algunas manchas superficiales.

No acudir a las revisiones

“Para disfrutar de una óptima salud bucodental es necesario mantener unos buenos hábitos de alimentación e higiene y acudir periódicamente a las revisiones odontológicas, pues son fundamentales para detectar patologías orales y tratarlas a tiempo”, afirma el presidente del Consejo General de Dentistas, el Dr. Óscar Castro Reino.

Comer después del cepillado nocturno

Durante la noche disminuye la formación de saliva en la boca, porque al dormir movemos menos la lengua y los labios. Debes saber que la saliva ayuda a los dientes a defenderse de las bacterias.

El cepillado por la noche es muy importante para evitar que los restos de alimentos estén en contacto con las piezas dentales durante 8 horas.

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